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Abriéndote a perspectivas nuevas...


...permites que entren a ti nuevas formas de ver el mundo.


Tengo mi enfoque.

Tengo mi manera de ver las cosas.


Aunque desde hace un tiempo, algo me dijo que tenía que aprender a ver y a abrirme a nuevos puntos de vista. Igual no míos. Sino de otros.


A no juzgarles.

A no imponer.

A escuchar mejor.


Y a entender que cada cuál vemos el vaso de una manera, vemos la vida de manera personal y que una misma mirada, no siempre ve lo mismo.


Y ahí reside la grandeza de la vida.



En que cada uno de nosotros aporta algo a los otros.

Y eso es grandeza.


Permitir y aceptar otras miradas, que nos ayuda a enfocar nuestra vida de forma más amplia, tolerante y grandiosa.


Pedir ayuda.

Saber recibir ayuda.


Escuchar a esas personas que te aman.


Observar y empatizar para ponerte en los zapatos de otro.


No es lo mismo mirar siendo un jugador, que siendo un entrenador, que siendo el árbitro, que siendo el presidente del club o un aficionado.


Cada uno tendrá una "realidad" de algo sucedido y cada uno responderá de manera diferente ante ese mismo acto.


Y todo está bien.


No hay correcto ni incorrecto, porque lo que define cada uno es distinto según su mirada.


Porque solemos pensar que aquello que nosotros no vemos o no entendemos no tiene sentido ni es real. Pero puede que otro, esa parte ya la haya visto y sea conocida para él, integrando ese lado en su mirada y sintiendo algo que nosotros todavía no hemos descubierto.


Por eso, escucha, abre tu mente y tu corazón y permite que cada realidad llegue a ti sin alterarte, sin estremecerte, manteniendo tu calma y confianza, abriendo los brazos para abrazar esa bella mirada.


Hoy, abrázate.

Y abraza.


Es viernes.

Sé feliz.




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